He recorrido países en desarrollo donde el tráfico y la contaminación son opresivos, y la comida es sospechosa. Durante algunas conferencias, el aire acondicionado y el sistema de sonido funcionaban mal, y luego la gente se agolpaba sofocantemente para la firma de los libros. Justo cuando llegué a sentir pena por mí mismo, y listo para renunciar a mis viajes para siempre, conocí a una enfermera que llevaba a cabo una programa para tratar el SIDA en zonas remotas gracias a una motocicleta que transitaba calles de barro por cuatro o cinco horas cada día. Justo en ese punto me recordé a mí mismo una de las razones más profundas por las que viajaba, el verdadero origen de este libro. Yo busco una fe que importe.

 

“Pocos son mejores que Yancey en dar respuestas que puedan calmar una fe que casi está hecha añicos”.

—Charles Swindoll

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He recorrido países en desarrollo donde el tráfico y la contaminación son opresivos, y la comida es sospechosa. Durante algunas conferencias, el aire acondicionado y el sistema de sonido funcionaban mal, y luego la gente se agolpaba sofocantemente para la firma de los libros. Justo cuando llegué a sentir pena por mí mismo, y listo para renunciar a mis viajes para siempre, conocí a una enfermera que llevaba a cabo una programa para tratar el SIDA en zonas remotas gracias a una motocicleta que transitaba calles de barro por cuatro o cinco horas cada día. Justo en ese punto me recordé a mí mismo una de las razones más profundas por las que viajaba, el verdadero origen de este libro. Yo busco una fe que importe.

 

“Pocos son mejores que Yancey en dar respuestas que puedan calmar una fe que casi está hecha añicos”.

—Charles Swindoll